lunes, 2 de mayo de 2011


Quiero tener tu perfume celestial

quiero degustarlo alborotando mis sentidos,


quiero sentir tu presencia en mis poros,


quiero colgarme en tu mirada;


amo los segundos infinitos a tu lado,


amo esa sonrisa aniquiladora,


amo la dulzura cuando me tocas,


amo amarte sin tapujos,


y aun me queda tiritando en mi ser


el bálsamo de tus besos;


cuando la infame distancia


me arrebata tu cercanía


y me deleito expedito


con el recuerdo de tu aroma,


aunque la sórdida madrugada


me asfixia sistemáticamente


arrojándome al dolor mundano


cuando no estás a mi lado


y no siento el jadeo de tus poros


pues ansío tocar tu corazón sutilmente,


ansío perderme en tus pupilas traviesas,


ansío estar en tus sueños más prohibidos