Desvaríos de Majinga SXEtto

"Se Puede juzgar a una sociedad por la forma en ke son tratados sus animales"
Mahatma Gandhi

……se sentó en la mesa llena de platos ya usados, una mesa repleta de tenedores y kuchillos (Armas De destrucción Masiva) gastados kon el roce frenétiko al aserrar el tejido semi-kocido, al atravezar las fibras de akel ser ke nunca tuvo, tiene y tendrá (kien sabe, komo van las cosas……) forma de protesta ni manera de decir BASTA, en la televisión pasaban el resumen de los deportes “….y el árbitro dijo………no va más!!!!!” presionó kon ansiedad los botones del pekeño kontrol remoto, pasó de tortura en tortura….. tssssssst…mire damita kaballero ya no va a necesitar más cirugías kostosas ahora llegó el nuevo y revolucionario korrector de naríz “perfek nos” tssssst…..”un delinkuente asesina a un transeúnte con dos balazos, el movil del crimen sería el robo tssssssst, …..en lo internacional la policía rusa reprime violentamente marcha en kontra del presidente Putin… y así kontinuó en un ciklo ke parecía infinito kanal por kanal tsssst tsssst tssssst y kuando parecía ke la kaja boba no podía entregar más sangre y violencia zaz!!!! el anuncio retumbó en sus oídos y se clavó en lo más profundo de sus recuerdos; komo un resorte saltaron del desván de los recuerdos las imágenes dolosas ke una vez le produjeron una fuerte jakeka y ke le dejaron

toda la semana kon la sensación de impotencia y ganas de salir con un bat y kaerle a palos al primero ke pida un “kombo KFC receta original”; y es ke las imágenes tan krudas, llenas de salvajismo y extrema krueldad karentes de respeto y tolerancia por las demás formas de vida le kalaron hasta los huesos y veía komo esa sensación hacía su magistral aparición volvía a tallar la herida en su alma, volvía a darle una vuelta más al nudo ke una vez se atoró entre su garganta y la boka de su estómago, le daba un apretoncito de konfianza más; su reacción fue inmediata al ver komo el individuo tomaba un garrote y kon saña, komo si ese golpe le fuese a dar el kampeonato mundial de béisbol, le asestaba un violento golpe en la krisma del indefenso ser; ke no entendía porke su vida debía tener ese desenlace; sus párpados se cerraron inmediatamente komo si de preservar sus ojos se tratase, preservarlos de tan hirientes imágenes, esperó unos segundos ke parecían una eternidad mientras eskuchaba al konista del reportaje argumentar ke no se invierte dinero en mejorar la infraestructura de ese nefasto lugar.

Transcurrieron cerka de 5 segundos y sus párpados se abrieron de nuevo solo para presenciar nuevamente ke el indefenso ser convulsionaba por el suelo tratando de recuperar su erguida y alguna vez orgullosa posición, las lágrimas se peleaban por salir su visión se volvía kada vez más akuosa, el luchaba por kontener ese sentimiento ke una vez lo mantuvo al borde de kometer más de un krimen akella vez, pero logró mantener el kontrol y aunke kiso cambiar el kanal, su mano derecha se kedó estática, no pudo, no kiso, no logró ke sus dedos respondieran a su cerebro.

La siguiente imagen ke se metió kual ráfaga de metralleta fue la de un vergajo (porke no existe otro kalifikativo) sosteniendo un tubo con una vara plateada al final; conectado a un ekipo komo de la era espacial, inkrustándole el extremo de la vara plateada en la nuka, a la altura del cerebelo, miró al pobre ser kaer inmóvil hasta estrellarse de bruces en el ensangrentado pavimento, la mirada del infelíz ser traspasó su cabeza y se perdieron los dos en un duelo a muerte ke fue interrumpido por la hoja de acero ke se dirigió rauda y velóz a la garganta del inmóvil kuerpo por el ke aun rekorrían cientos de voltios lacerando los tejidos; kontrayendo cada fibra, sus ojos nuevamente se

cerraron, el reflejo fue inmediato, pero esta vez no duró mucho -apenas un parpadeo- para dejar su mirada fija en los estertores ke el ser akel daba en el suelo y sus miradas nuevamente se abrazaron en la soledad de los kondenados, de los inocentes ke sufren kada segundo la desidia de no saber por ké su libertad les ha sido robada aun antes de nacer, akellos ke son kondenados aun sin haber kometido krimen alguno, a kienes los han markado kon la señal de la Bestia komo dice el Apokalipsis; esa Bestia ke no conoce las elementales normativas de konvivencia, respeto, tolerancia, kompasión, ese monstruo de siete kabezas ke blande su espada al cielo y de un solo tajo cercena lo ke se le ha dado a kuidar y proteger, esa BESTIA llamada Ser Humano.

El individuo atravesado por las mil dagas inkandescentes no pudo resistir más y ese enojo, frustración e impotencia ke krecía en su interior terminó por explotar y un sonoro grito se eskuchó en la habitación “Hijo de mil Putas”, su madre ke miraba espektante a su lado no se inmutó al igual ke los demás individuos ke estupefaktos miraban la inklemencia, él no pudo más y su boka por fin salió del koma para modular las pokas palabras ke su perforado corazón podía juntar “Algún día pagarán por todo eso, la ley del karma es inplakable”; su madre no decía nada, kizá estaba tan petrificada komo la mano ke sostenía el kontrol remoto y ke se negaba a presionar el gris botón ke ponía “fin” a tal barbarie.

El don de la palabra ke karacterizaba al individuo esta vez brillaba por su ausencia, parecía komo si le hubiesen arrankado akella parte del cerebro ke controla las palabras, tal vez una de esas dagas lo perforó por esa parte, kien sabe…… su madre por fin salió del katatonismo y kon un suspiro justifikó su complicidad ante tal akto de brutalidad en su más álgida expresión, se levantó y dirigiéndose a la kocina arrojó la más cruel de las preguntas a los demás individuos ke lo acompañaban, “kien desea jamón para su sándwich?”. El sintiéndose akribillado dejó kaer sus hombros y bajando su kabeza kon la mirada klavada en el suelo se dirigió a la puerta ke lo sakaría de ese festín endemoniado ke se repite día a día……….

Has a otros lo ke deseas ke se haga kontigo

PD: Lo iróniko de todo es ke el reportaje trataba del mal estado de los kamales, ke poko se preokupa el ser humano por respetar la vida de los demás seres vivos, pero ke se puede esperar si ni la de nuestra propia especie es respetada